-
Violencia, ¿Un asunto cultural y de falta de educación o de
narcotráfico?
-
¿Legalización? Tal vez nunca debieron ser ilegales
-
Violencia en el mundo, ¿Dónde está México?
-
Policías comunitarias y bienes públicos como posible solución
Las delegaciones políticas del DF, Xochimilco, no tienen policía. El
régimen especial del Distrito Federal como capital centraliza el mando policiaco
en el Gobierno del DF, cuestión que debiera replicarse en todos los estados,
entonces, ¿Qué puede hacer un delegado contra la violencia y delincuencia?
Desde hace más
de una década, el enfoque nacional contra el crimen organizado ha sido un
choque directo contra los criminales, muertos y miles de detenidos. Se organiza
un gran show mediático con la detención de grandes capos mientras que los
inferiores, al llegar a las manos del poder judicial, se funden en una gelatina
burocrática corrupta que revierte los escasos golpes que sufría el crimen
organizado.
A la violencia
inmediata hay que atacarla, pero hay dos tipos de violencia: la de guerras,
guerrillas y conflictos entre naciones, étnicos, territoriales, etc. Pero a la
violencia arraigada, a esa que sigue sucediendo a pesar de captura y muerte, la
que está arraigada en las sociedades, ¿Cómo se le combate?
Evidentemente no
se pueden dejar de perseguir criminales con la policía, sin embargo, la
prevención de la delincuencia debió ser una política prioritaria desde hace
varias décadas en nuestro país.
No importa la
percepción que tengamos de nuestra zona o país respecto al aumento de crímenes,
la región latinoamericana (que va de México a Colombia y Venezuela, por toda
Centroamérica, a excepción de Costa Rica y Nicaragua, y llega a algunos países
del caribe) es y ha sido durante todo el siglo XX y lo que va del XXI la región
más violenta del mundo. Con o sin guerra contra el narco, los asesinatos por
cada cien mil habitantes suceden como un fenómeno social inherente. A psear de
esto, México no está en el top 10 de los países más violentos de América
(Posición 16, asesinatos por cada 100 mil habitantes) y a nivel mundial estamos
muy lejos de ser el país más violento. Sin embargo, la problemática regional
llama la atención por la coincidencia de muchas variables. En Brasil el
conflicto contra el narcotráfico es muy diferente, igual en Venezuela u
Honduras, y esos tres son mucho más violentos que México.
Fuente: www.mexicomagico.org
Algo anda mal en
nuestra región, y siendo que el narcotráfico pareciera ser una de las múltiples
variables que la causan y tal vez una no determinante, debemos buscar y
entender qué es lo que nos hace violentos.
Los bienes, como
las drogas, al ser legales (Canadá y Holanda), solo dañan al consumidor. Así
como comprar un cuchillo, si uno decide cortarse las venas, el único afectado
directamente es el suicida. El fabricante de cuchillos no está inmerso en un
cártel violento por lo que causa su producto. Por ello no existen cárteles de
tráfico de Thinner o Resistol. Quien
va a dañar su cuerpo por placer, depresión o desconocimiento toma esa decisión individual con todo derecho.
Quien consume Thinner no daña a nadie
más que así mismo. Si todas las drogas fueran
legales, el costo de oportunidad de fabricarlas y distribuirlas bajaría, habría
competencia, regulación, impuestos y no habría violencia en dicho negocio. Al
ilegalizar las drogas, o cualquier otro bien, es imposible acabar con la
demanda mágicamente; los consumidores de droga no dejaran de desearla, por lo
tanto habrá quien se las provea. Siempre se creará mercado negro para mantener
la demanda, sin embargo, el costo de oportunidad de los productores y
distribuidores de este bien crece considerablemente. Es decir, si algo es
ilegal, es más riesgoso, y los competidores por el mismo bien, al actuar fuera
de la ley, pueden llegar a los asesinatos y extorsiones para controlar el
negocio y por supuesto, el precio de dicho bien sube muchísimo por el riesgo
que conlleva su producción y distribución. Y no solo eso, al no haber
regulación del Estado en este campo, las drogas pueden estar peligrosamente
alteradas.
Por otro lado,
legalizar la droga hoy en México no garantiza que disminuya la violencia que
ésta generó en los últimos años[1].
El Código Penal Federal no persigue el consumo o posesión personal de cualquier
droga en dosis individuales, entrando en una controversia así con la ilegalidad
de la procedencia de ésta. La lección que nos deja este razonamiento es que,
ilegalizar bienes provoca mercado negro y violencia, pero legalizar estos
bienes de vuelta no garantiza que los cárteles u organizaciones que producían
y/o distribuían estos bienes dejen de pronto su modo de operación para volverse
empresarios competitivos cumpliendo toda norma[2].
Por ello, la
violencia en México ya no radica en las drogas sino en la cultura de hacer
dinero rápido y la del poder. Por ello el secuestro y la extorsión, el control
de gobiernos y otras empresas ha sido el fuerte de los nuevos cárteles
mexicanos. Han infiltrado todos los círculos de la sociedad mexicana haciendo
muy difícil combatir a un enemigo que está en todas partes y no tiene enemigos
claros[3].
Podríamos
asegurar que esta violencia, como se muestra en toda la región latinoamericana,
obedece a aspectos culturales y de desarrollo de los sistemas políticos.
Honduras es el país más violento del mundo pero en su frontera sur está
Nicaragua, como el país más seguro de América. Las drogas siguen pasando por
Nicaragua, al igual que las intervenciones norteamericanas y cualquier otra
variable que usemos para explicar la crisis de seguridad regional, ¿Qué pasa en
Nicaragua?
TASA DE HOMICIDIOS
|
||
LUGAR
|
PAÍS
|
TASA
|
1
|
Honduras
|
91.6
|
2
|
Venezuela
|
53.7
|
3
|
Jamaica
|
41.2
|
4
|
Islas
Vírgenes Estadounidenses
|
39.2
|
5
|
El Salvador
|
39.19
|
6
|
Belice
|
39
|
7
|
Guatemala
|
38.5
|
8
|
San
Cristóbal y Nieves
|
38.2
|
9
|
Zambia
|
38
|
10
|
Bahamas
|
36.6
|
24
|
México
|
23.7
|
Nicaragua es
mucho más pobre que México, menos industrializado, agrario y con un sistema
político turbulento y violento en los momentos en que hubo cambios de régimen.
Por lo tanto la pobreza no engendró la violencia. Sobre la pobreza
preguntémonos, ¿Si no tuviéramos para comer, y estuviéramos en desesperación,
mataríamos a alguien para robarle un trozo de comida? O peor aún, ¿Alguna causa
justifica arrancarle la cara a un estudiante y quemar vivos a otras 40
personas? Hay países más pobres y hambrientos que México sin embargo no existen
esos niveles de violencia y sadismo.
TASA DE HOMICIDIOS TOP 10 MUNDIAL
(MENOR)
|
||
LUGAR
|
PAÍS
|
TASA
|
1
|
Mónaco
|
0
|
2
|
Palaos
|
0
|
3
|
Hong
Kong
|
0.2
|
4
|
Singapur
|
0.3
|
5
|
Islandia
|
0.3
|
6
|
Japón
|
0.4
|
7
|
Polinesia
Francesa
|
0.4
|
8
|
Brunéi
|
0.5
|
9
|
Bahréin
|
0.6
|
10
|
Noruega
|
0.6
|
Creo que la
mejor prevención está en los valores, la educación, el capital social, la
solidaridad en los barrios y comunidades y sobre todo, en el esparcimiento
sano: cultural, artístico y deportivo. Por otro lado, los policías no pueden
ser elementos improvisados que vengan de otras entidades federativas, la
policía de cada barrio debe ser un elemento de esa comunidad nombrado por ella
y que rinda cuentas a ella; con reconocimiento, educación, capacitación y bien
remunerado.
¿Qué puede hacer
Xochimilco frente a la escalada de violencia actual? Organizar su vigilancia
por barrio y nombrar a sus policías en acuerdo con el GDF. Inversión
considerable en las escuelas públicas y técnicas para que tengan materias y
cursos artísticos y culturales por la tarde que las haga de tiempo completo.
Construcción de instalaciones deportivas de primer nivel para estas escuelas y
para el público en general de manera masiva, con cuotas accesibles o gratuitas.
El objetivo es fomentar personas educadas, sanas, y con redes sociales fuertes
entre sus vecinos.
Otra opción para
los gobiernos delegacionales es rescatar los espacios públicos. Si no existen
plazas seguras, reguladas, dignas, bonitas, con comercios, bares, restaurantes,
calles peatonales, donde los jóvenes y toda la gente pueda salir a actividades
de esparcimiento digno y sano habrá desviaciones, aislamiento social, ocio y
resentimiento.
Finalmente, la
vivienda es fundamental para el fortalecimiento del capital social. Ricos y
pobres deben coexistir en los mismos espacios, y ambos compartir los mismos
bienes públicos. El rico tendrá una mansión, pero el pobre tendrá un parque
hermoso que el rico también pueda compartir. Así se distribuye la riqueza, en
bienes públicos de calidad y no en despensas.
Se pueden
cambiar las cosas.
[1] http://www.elpinerodelacuenca.com.mx/epc/index.php/politica/83396-legalizacion-de-drogas-no-terminara-con-violencia-del-crimen-organizado-en-mexico-incrementa-consumo-en-oaxaca-onu
[2] http://www.nexos.com.mx/?p=15501
[3] http://www.ilustracionliberal.com/45-46/el-fracaso-de-la-guerra-contra-las-drogas-juan-carlos-hidalgo.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario